
Sabías que...
El Teatro Romano de Cartagena se descubrió por casualidad se construyó a finales del siglo I a.C. en tiempos del emperador Augusto. Tenía capacidad para 6.000 espectadores.
El viajero podrá degustar la gastronomía propia de una ciudad marinera, pero al tiempo abierta a su campo. Pescados y salazones, el típico caldero- un guiso de arroz al estilo de los pescadores- junto a las carnes y los productos agrícolas de su feraz campo, todo ello regado con los vinos de la tierra y acompañado de las bebidas tradicionales, como el café asiático, que hacen las delicias de cuantos se acercan a conocer su tradición culinaria.
Cartagena posee un litoral de gran belleza, destacando las playas de Cala Cortina y el Portús, además de las famosas playas de La Manga del Mar Menor y de Cabo de Palos. Pero Cartagena añade a su oferta de la zona litoral la posibilidad de practicar el turismo rural en alguna de sus muchas pedanías interiores. Zonas tranquilas y próximas a espacios naturales de interés medioambiental donde poder practicar actividades en contacto con la naturaleza y con el valor añadido de su proximidad a la costa.
La oferta festiva de la ciudad se complementa con La Mar de Músicas, un festival de músicas del mundo que se celebra en el mes de julio y que, pese a su corta vida, ha alcanzado el unánime reconocimiento nacional e internacional.
Una riqueza en la que Cartagena Puerto de Culturas desarrolla la unificación temática para que sea más accesible al viajero. Al pasear descubrimos también que la ciudad presenta una huella militar que nos remonta a época medieval, cuando se construyó el Castillo de la Concepción, lugar en el que, dada su privilegiada situación, un Centro de Interpretación ofrece un explicación de la ciudad y su historia. Cartagena Puerto de Culturas trabaja para aumentar el potencial turístico de la ciudad, facilitando la accesibilidad y posibilitando a personas con movilidad reducida el pleno disfrute de los recursos turísticos, como el ascensor panorámico que une el Puerto con el Castillo de la Concepción, mejorando la señalización de la ciudad, dotando de transporte turístico terrestre y marítimo y en definitiva, con la puesta en valor de la completa oferta de la ciudad.
Top 10
Con más de 3.000 años de historia, Cartagena ha sido escenario de algunos de los pasajes más increíbles de la historia. Hoy, esta ciudad púnica, romana, militar y modernista ofrece tantas cosas que ver y que hacer que no es de extrañar que sea uno de los destinos más seductores del Mediterráneo.
HISTORIA MILENARIA
El Centro de Interpretación de la Historia de Cartagena puede ser el mejor punto de partida para comenzar la visita a esta ciudad milenaria. Visítalo y recorre tres mil años repletos de saber, historia y el legado de los pueblos y civilizaciones más importantes del pasado concentrados en una visita de una hora de duración.
EL TEATRO ROMANO
El museo del Teatro Romano es el símbolo indiscutible de Cartagena, un conjunto arquitectónico diseñado por Rafael Moneo donde cada sala es más espectacular que la anterior. Integra el palacio de Pascual Riquelme, la catedral de Santa María la Vieja y la parada más impactante: el Teatro Romano. ¿Sabías que el teatro de Carthago Nova, construido por el emperador Augusto en el siglo I a. C., no fue descubierto hasta el año 1990?
SIÉNTETE COMO UN ROMANO
Revive la historia y recorre los escenarios que fueron testigos de los sucesos del pasado. Siéntete como un niño en el barrio del Foro Romano de la antigua Carthago Nova. Visita este yacimiento que ha permanecido oculto durante más de veinte siglos. Destaca el complejo termal y el edificio del atrio. Si vas en familia, no pierdas la oportunidad de realizar una visita teatralizada.
TESOROS MARINOS
El Museo Nacional de Arqueología Subacuática custodia el famoso "tesoro de la fragata Nuestra Sra. De Las Mercedes", un botín con 570.000 monedas de oro y plata del siglo XVIII y XIX. ¡Te encantará visitarlo! Si te quedas con ganas de más, puedes ir al Museo Naval, otra parada realmente interesante. Destacan las exposiciones sobre navegación y construcción naval y la Sala Isaac Peral, donde te espera el submarino que durante más de 80 años ha sido símbolo de la ciudad portuaria.
PASEO EN BARCO
Pasea en barco hasta los rincones más evocadores de la dársena natural bordeando el sistema de fortificaciones de la bahía. Obtendrás unas vistas increíbles. La ruta incluye una visita al Centro de Interpretación de la arquitectura defensiva de Cartagena, donde se muestra a fondo la historia sobre el papel comercial y militar que jugó esta encrucijada del Mediterráneo a lo largo de su prolongada historia.
UNA PLAYA CON ENCANTO
Cala Cortina es la playa urbana de Cartagena. Para acceder a ella solo hay que atravesar un túnel y aparecerá ante ti una maravillosa cala mediterránea de lo más completa. Con zona de juegos para niños, paseo marítimo, restaurante¿ Disfruta de un refrescante baño, practica buceo y deléitate con la vida submarina de este litoral.
¿SENDERISMO O BUCEO?
Si te gusta el senderismo, haz la ruta que va desde Cala Reona a Calblanque, un recorrido de poca dificultad que puedes finalizar con un baño en las aguas cristalinas de este parque natural. No te olvides de la gorra, los prismáticos y la cámara de fotos. Otras paradas imprescindibles son la playa del Portús y Cabo Tiñoso, destinos que enamoran a los submarinistas. ¡Tan espectaculares son los fondos marinos como la superficie!
DE FIESTAS Y FESTIVALES
Uno de los tesoros de Cartagena es su Semana Santa, declarada de Interés Turístico Internacional, se vive de forma única. Y si visitas Cartagena en verano, un plan `top¿ puede ser pasar el día en la playa de Calblanque y la noche en el festival La Mar de Músicas, donde te empaparás de arte y músicas del mundo mientras disfrutas de unas vistas de ensueño, a orillas del Mediterráneo.
BAJO EL FARO
El domingo es día de mercadillo en Cabo de Palos, junto a la Manga del Mar Menor. Deambular por los puestos, conseguir alguna ganga, disfrutar del ambiente marinero y finalizar la jornada degustando un delicioso caldero frente al mar, es un plan redondo. Sigue el paseo y llega hasta el faro de la localidad, uno de los mejores puntos para disfrutar del horizonte junto al Mediterráneo.
SABOREANDO
Pescados a la brasa, asados o a la sal; michirones o arroz en caldero. ¿Qué te apetece? Acompaña estos platos típicos de Cartagena con la ensalada cantonal y dale un gusto a tu paladar. Para el postre podrás elegir entre frutas como el melón y el higo de pala, pero tampoco dejes de degustar el tocino de cielo. Y como colofón, el famoso café asiático, te terminará de conquistar.