El puerto es el eje central en torno al que se aglutina el pueblo de Cabo de Palos. Aquí la actividad es continua, tanto por parte de los pescadores que siguen manteniendo sus artes tradicionales, como por aquellos que disfrutan del ocio náutico en sus diversas variedades, sobre todo el buceo. Sumergirse en los fondos de la Reserva Marina de Cabo de Palos e Islas Hormigas, reconocida como una de las mejores de Europa, es toda una experiencia y un privilegio, por ello es continuo el ir y venir de las embarcaciones de los centros y escuelas de esta práctica deportiva que tienen sus sedes en torno a la dársena. La dársena parte en dos el Paseo de la Barra. Hacia la derecha se extiende Zeneta, que todavía mantiene las antiguas construcciones de casitas bajas con sus porches mirando al mar, dándole esa esencia de pueblo marinero. En este lado del puerto también se encuentra la iglesia, de arquitectura contemporánea que sustituyó a la antigua, y el Centro de Documentación y Exposición de Cabo de Palos, donde podremos conocer y descubrir la extraordinaria diversidad de sus fondos marinos, la historia de los grandes naufragios de Cabo de Palos y la formación del Mar Menor. El frente izquierdo del Paseo de la Barra se muestra más concurrido de residentes y visitantes que disfrutan de las terrazas en sus cafeterías y restaurantes que permiten degustar la gastronomía del lugar en la que la estrella es el arroz caldero. Desde el extremo de este paseo arranca el sendero, que bordeando las calas y acantilados nos lleva hasta su famoso faro. A falta de gran plaza central del pueblo, su dársena ejerce como tal, pues en torno a ella tienen lugar los eventos relevantes en la vida de Cabo de Palos como son la Procesión marítima de la Virgen del Carmen o la del Cristo de los Pescadores el Jueves Santo.

El puerto es el eje central en torno al que se aglutina el pueblo de Cabo de Palos. Aquí la actividad es continua, tanto por parte de los pescadores que siguen manteniendo sus artes tradicionales, como por aquellos que disfrutan del ocio náutico en sus diversas variedades, sobre todo el buceo. Sumergirse en los fondos de la Reserva Marina de Cabo de Palos e Islas Hormigas, reconocida como una de las mejores de Europa, es toda una experiencia y un privilegio, por ello es continuo el ir y venir de las embarcaciones de los centros y escuelas de esta práctica deportiva que tienen sus sedes en torno a la dársena.

La dársena parte en dos el Paseo de la Barra. Hacia la derecha se extiende Zeneta, que todavía mantiene las antiguas construcciones de casitas bajas con sus porches mirando al mar, dándole esa esencia de pueblo marinero. En este lado del puerto también se encuentra la iglesia, de arquitectura contemporánea que sustituyó a la antigua, y el Centro de Documentación y Exposición de Cabo de Palos, donde podremos conocer y descubrir la extraordinaria diversidad de sus fondos marinos, la historia de los grandes naufragios de Cabo de Palos y la formación del Mar Menor.

El frente izquierdo del Paseo de la Barra se muestra más concurrido de residentes y visitantes que disfrutan de las terrazas en sus cafeterías y restaurantes que permiten degustar la gastronomía del lugar en la que la estrella es el arroz caldero. Desde el extremo de este paseo arranca el sendero, que bordeando las calas y acantilados nos lleva hasta su famoso faro.

A falta de gran plaza central del pueblo, su dársena ejerce como tal, pues en torno a ella tienen lugar los eventos relevantes en la vida de Cabo de Palos como son la Procesión marítima de la Virgen del Carmen o la del Cristo de los Pescadores el Jueves Santo.